miércoles, 9 de febrero de 2011

Sobre El Cuaderno

Mi diario de Tareas
Flor del oto

A Cristian siempre le gustaba anotar todo en la clase, su mama lo esperaba cada tarde no como nosotros casi la mitad del curso se iba en el furgon las clases a veces se hacían una verdadera lata pero Cristian les hacía parecer divertidas. Como ya dije era mi compañero en una oportunidad la profesora Blanca Retamales estaba pasando una materia del helio y el muy gozosamente dijo que un amigo de el habia muerto por causa del helio la señora Retamales le pareció algo extraña tal afirmación y pregunto — Cristian digame como murió su amigo por culpa del helio si, dijo muy seriamente él se llamaba Helios Ness. Para que les voy a contar como la señora Blanca Retamales no paraba de reír estaba roja así que con unos amigos le pusimos la roja Retamales, yo no sabía quien era ese Helion Ness. Según me entere después era de una serie de tv antigua, el protagonista era Robert Star según Magda la peinados de afro me dijo que él sería como patricio, ¿que patricio? pregunté extrañado. Estrella dijo, ésa era la Magda ...

—Bueno niños para mañana necesito que traigan una flor del oto dijo Blanca Retamales. A decir verdad no debió pedirla yo no se donde se consiguen y justo en el grupo me toco hacerla con Cristian, a él siempre se le ocurren cosas es bien loco éste. Cuando ya teníamos los cinco grupos seleccionados arbitrariamente por Blanca Retamales según porque de otra forma se producía bulla indeseable en la sala nos marchamos a casa de Cristian para ponernos de acuerdo respecto al trabajo de la flor del oto

La reunión se había hecho divertida, su mama señora Bárbara trajo jugo y unas galletas yo no las habia probado nunca. Cuando Cristian le pasó el papel con los materiales a su mama ella al parecer le humeo el coco porque se preguntaba de dónde sacarían tal planta. Según los explicó el papa de Cristian esa planta no es de aquí, creo que de ninguna parte, la señora Bárbara y su marido creo nunca habían llamado tanto por teléfono como esa tarde tratando de encontrar la flor del oto pero lo mejor fueron las galletas, las últimas que comí estaban casi recién salidas del horno la señora dijo que las guardáramos sino nos dolería el estomago. No haberle hecho caso esa noche se me puso el estomago como tambor pero no me dolía...

La tarde del otro día sería la mejor desde que había llegado al curso, resulto que unos familiares de Cristian sabían de la existencia de la flor del oto según le habían comentado estaba en una casa. Durante el viaje en autobús todos dijeron que la casa estaba encantada cosa que la creí, saben no lo cuente tenía miedo. Cuando llegamos al paradero uno de los primos de Cristian no esperaba, saben lo que me sucede cuando me da miedo bueno fui al baño de la casa ....

Saben el lugar estaba desaseado pero no me importó ahí estaban mis demás compañeros de colegio y dos de los más grandotes primos del Cristian — vengan muchachos es por aquí dijo el moreno y pesadote de los dos es por aquí. Caminamos cerca de dos horas y llegamos a una casona grande saben si tenía miedo aun mas cuando vi esa destartalada casa le faltaban las ventanas y salía un olor no muy recomendable de dentro — si aquí chicos es pero ustedes deben entrar nosotros nos esperaremos si, dijo la Magda y su cabellera afro, con lo que nos acaban de contar estos pelotudos no tengo ni deseos de entrar allí. Vamos vamos de seguro no querrán reprobar en la clase de doña Blanca Retamales dijo Cristian quien después de escuchar las historias de que en la casa se hallaba el fantasma de Vicentina Toledo Urmeneta, una señora vieja bruja del siglo pasado que había hecho niños de chocolate no era nada de simpática la situación..

Eyi vengan por aquí, dijo el gordo Salazar quien se le notaban los sándwich en el bolsillo de su chaqueta, a pesar de que había luz afuera adentro no se veía nada era una oscuridad total...

Todos llegamos a tientas a lo que sería living de la casona, Cristian encendió su linterna estaba muy feo, había varias enredaderas en su interior y flores. Creo que fuera no había nada ni pasto al parecer y según contaban la Vicentina Toledo las llama cada mañana a las flores del patio. Cuando todos encendimos las velas pudimos ver mejor en un sillón había varias flores del oto, cuando gordo Salazar se acercó para cortar una se escucho una voz no sé de donde — quien osa sacar mis flores. Yo pensaba para mis adentro todas las maldiciones para la Blanca Retamales, la voz volvió a preguntar la segunda vez, algunos trataron de salir pero se les apagaron sus velas y no lo hicieron, yo saque la voz mientras Magda y su afro peinado se escondía tras de mí para que les voy a ser honrado si hubiera habido algún baño era hora que ya estuviera — sabe señora dije a si tembleque nos pidieron una flor del oto para una tarea. — Si, quién pide tamaña cosa dijo la voz. La señora Blanca Retamales. Miren, dijo la voz, lleven una sola y digan a esa señora. Cuando dijo eso se sintió un tremendo golpe además cayeron varios palos, Cristian alumbró mejor, los cabezones primos de Cristian eran los fantasmas ya no les cuento más me llaman a almorzar .

Marzo del 89

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